👕 Ganarás mucho más si aplicás bien el Principio de Menger

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Hola estimado lector,

La semana pasada escarbamos, escarbamos y escarbamos.

Esta semana, vamos a aprovechar que el presidente argentino habló mucho del principio de imputación de Menger, refiriéndose a las empresas que subían sus precios con la excusa de que sus costos habían aumentado.

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Sucedió en 2008.

-Antes de aceptar el cambio de precios necesitamos ver la estructura de costos de la empresa, nos dijo el gerente de Compras.

Uno de esos bancos que, de tantas adquisiciones y cambios de nombre, ya no puedo rastrear, nos descolocó con ese requisito.

Durante años veníamos revisando nuestros precios (hacia arriba, claro, era en Argentina) sin demasiada discusión, pero esta vez pedían un Excel detallado con la justificación del aumento que queríamos hacer.

Les compartimos la estructura de costos, algo de lo que nos arrepentimos hasta perder el cliente unos años después.

Pero, así como una fábrica de productos alimenticios dice “aumentamos nuestros precios porque el sindicato aumentó sueldos”, le aceptamos a ese banco que nuestros aumentos tenían que estar alineados a nuestros costos.

Y esos dos casos son idénticos a uno típico…

“Leo, no entiendo por qué no me pagan lo que merezco. Tengo un dos títulos, un MBA, y me deslomo trabajando”, me escribieron hace poco.

Portador de malas noticias

En la escuelita de CEOs nos enseñan a dar noticias, sobre todo las malas.

Pero no le contesté.

Hasta hoy.

Pero, ¿es eso así?